El hombre de la cámara

El hombre de la cámara
Fotograma del filme de Dziga Vertov, El hombre de la cámara (1929)

martes, 14 de abril de 2015

Esteban Hoyos García
Código: 2508505
Teoría e historia de medios audiovisuales IV
14/04/2015
El triunfo de la voluntad: el documental como motor de ideologías
Leni Riefenstahl fue una de las directoras más importante del siglo XX. Su aporte al lenguaje audiovisual fue enorme y muchas de las innovaciones técnicas y estéticas propuestas en su cine se mantienen vigentes hasta la actualidad.
Riefenstahl comenzó su carrera trabajando como actriz en películas alemanas a mediados de los años veinte y adquirió una gran reputación en el mundo del espectáculo alemán. En 1932 debutó como directora en la película  La luz azul; la realización de esta película dio a conocer las capacidades de Leni Riefenstahl como directora y le posibilitó evolucionar hacia la fase de su carrera que la convertiría en un personaje de gran relevancia en la historia del cine: los documentales de propaganda.
El documental más relevante de su filmografía es sin duda El triunfo de la voluntad (1935); en esta película de propaganda se muestra el desarrollo el congreso del Partido Nacionalsocialista en 1934 en Núremberg. El documental, aunque reconocido actualmente por su gran valor artístico, ha sido fuertemente criticado por su compromiso político con el repudiado partido nazi. Riefenstahl también recibió fuertes críticas por su participación en el proyecto y por su vinculación con el nazismo, pero es necesario comprender el contexto histórico en el que surge el documental.
Tras el final de la Primera Guerra Mundial, Alemania se encontraba sumida en la pobreza y en la desesperación. Tras perder la guerra, Alemania tuvo que aceptar la firma del Tratado de Versalles, en el cual debía asumir la completa responsabilidad de haber ocasionado la guerra y se comprometía a dar concesiones territoriales y a pagar exorbitantes indemnizaciones económicas a los Estados que habían salido victoriosos. Para poder pagar esas deudas, el estado Alemán produjo una grandísima cantidad de papel moneda, lo cual acarreó una inflación nunca antes vista del marco alemán y generó una crisis económica aún mayor. Adicionalmente, tras el crack bursátil del ’29 en la bolsa de Nueva York, los Estados Unidos dejaron de prestarle dinero a Alemania. Sin estos estímulos económicos, las finanzas del país sufrieron un enorme colapso.  En este clima de incertidumbre, malestar social y pobreza surge la figura de Adolf Hitler. Hitler proponía la constitución de un estado fuerte, que pudiera lograr devolver a Alemania su rol hegemónico en el panorama político mundial; planteaba la necesidad de adoptar políticas expansionistas que pudieran permitir el resurgimiento económico alemán y que además lograran la conquista de las naciones que habían causado la decadencia de la nación alemana tras la Primera Guerra Mundial. Hitler es aceptado por la población general como un mesías capaz de conducir al pueblo alemán hacia la prosperidad y la gloria.
En este contexto vive Leni Riefenstahl y,, al igual que la mayor parte del pueblo alemán, decide adherir al Nacionalsocialismo y acepta a Hitler como la solución a los problemas alemanes. Cuando Hitler conoce el trabajo de Riefenstahl, le pide que dirija el documental que muestre el encuentro del partido Nacionalsocialista en la ciudad alemana de Núremberg en 1934; a pesar de la poca experiencia con el género documental, Riefenstahl acepta y así surge El triunfo de la voluntad.
La película está dividida en cada uno de los cuatro días que duró el congreso. En ella Adolf Hitler asume un papel protagónico y es presentado como una figura heroica y esperanzadora. Otros personajes importantes son los otros líderes del partido Nazi, que son presentados como figuras poderosas que a través de sus discursos recalcan los valores del partido. Un personaje fundamental es el pueblo. La ciudadanía general de Alemania es representada como completamente leal a los ideales del partido Nacionalsocialista y con plena confianza en las capacidades de Hitler de liderar la nación hacia la gloria.
Estos objetivos de darle una cierta connotación al pueblo, a los líderes del partido y a Hitler se logra a la perfección a través del montaje y de la puesta en cuadro. A través del montaje se crea un diálogo entre el pueblo y Hitler, ya que a cada discurso de Hitler corresponde une respuesta eufórica de los espectadores. Por medio del uso de plano muy contrapicados de Hitler, se transmite la idea de Hitler como una figura mesiánica y todopoderosa. Otro recurso visual interesante es el empleo de tomas aéreas que demuestran el carácter multitudinario del evento y el enorme consenso del partido. La música también juega un papel fundamental para demostrar el carácter épico del evento.
Es indudable la efectividad del documental para transmitir una cierta ideología y para reforzar una serie de valores importantes del partido nazi como la unidad y el ansia de poder. También es indudable que el documental se enfrenta a una dualidad entre valor artístico y valor político.
Tras la caída del nazismo, Leni Riefenstahl fue condenada por haber realizado un documental que promovía a un partido que instauró un régimen basado en la violencia, el racismo y la xenofobia. A estas acusaciones Riefenstahl respondió diciendo que El triunfo de la voluntad no  es una película de propaganda, sino que es un documental histórico que pretende capturar la realidad alemana de la época. Aunque Riefenstahl lo niegue es evidente que la forma en que se trata el momento histórico en la película demuestra una actitud de la directora hacia los temas retratados.

Esta coexistencia del elemento artístico y del elemento social está presente en toda obra de arte y es evidente que no se pueden separar la una de la otra. El documentalista tiene que lidiar directamente y en forma más explícita con esta característica de la obra, pues la materia prima para la construcción de cualquier documental es la realidad y por ende no se puede desvincular de ella de modo alguno.

3 comentarios:

  1. Una de las problemáticas puestas en evidencia gracias a este texto, es la delicada linea entre propaganda y documento histórico en el caso de Riefenstahl.

    Si nos atenemos a las definiciones amplias del documental, Riefenstahl, en efecto produjo un documento histórico que puede ser leído como una muestra de la propaganda, así como también puede ser leído como un registro de histórico de como se desenvolvían ciertos acontecimientos.

    Si se quiere ir aún más lejos, se podría pensar que una de las cosas que le da el valor histórico al film de Reifenstahl es haber logrado por medio del tratamiento visual, dejar un registro de como podían estar viendo a Hitler y a su partido, los alemanes del común.

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  2. Del texto anterior rescato dos secciones. En primer lugar, los antecedentes históricos previos a la realizacion de "El triunfo", considero que explican de manera puntual la crisis económica, el malestar social y la pobreza vivida en alemania tras la primera guerra, al igual que las políticas del partido nacionalsocialista para surgir como nación.
    En segundo lugar, que subraya la efectividad de la gramatica del lenguaje cinematografico de la película: del montaje, los contrapicados y mas que nada las tomas aéreas.

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  3. Coincido sobre el adecuado contexto histórico y el planteamiento entre lo político y lo artistico.
    Formalmente no hay referencias bibliografica. En el aspecto reflexivo estuvo débil, mucha descripción poco análisis

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